El Arquitecto ocupa un espacio fundamental en el tiempo, con sus conocimientos y habilidades profesionales ha conseguido que sus edificios, ciudades y estructuras, sean absorbidos por la historia, ya que con su formación técnica, artística y social modifica formas de vida y cambia el mundo lentamente con la intención y la materialización de sus pensamientos plasmados en construcciones. El significativo aporte que realiza un arquitecto en la sociedad es primordial porque está relacionado con todos los espacios que puedan ser habitables, además que debe salvaguardar el apropiado desarrollo y progreso de sus construcciones para un óptimo resultado sin afectar el ámbito social; éste debe tener conocimiento del medio natural y artificial para así lograr formas habitables y armoniosas con el contexto generando un impacto positivo.
Un arquitecto debe de
estar a la vanguardia, debe tener conocimientos de diferentes materiales para
la construcción y de los distintos sistemas constructivos, además de diversas
técnicas para dar respuesta y solución a las exigencias de sus clientes y
también a todas las necesidades de la sociedad cumpliendo una reglamentación en
cuanto a la construcción y ordenamiento territorial que en su caso lo amerite
para brindar una satisfacción en términos generales.
“Un arquitecto
siempre debe estar dispuesto a dar una respuesta formal, espacial y
paisajística de lo que se requiera, porque
ve el mundo con otros ojos, ojos penetrantes que hacen entendible la realidad misma
de la vida…”
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